El geomarketing utiliza datos geográficos y análisis espaciales para comprender mejor a los consumidores, identificar patrones de compra, optimizar la ubicación de tiendas y mejorar las estrategias de marketing. Se trata de conocer más a los clientes, menudo desafío para el mundo del retail.
Imagina que tu cliente, ni bien entre a tu piso de venta, reciba un mensaje en su teléfono dándole la bienvenida u ofertándole ese producto que una y otra vez compra que ahora, además, está en oferta. Esto es posible gracias al geomarketing.
El geomarketing también desempeña un papel crucial en la planificación de campañas de marketing efectivas. Al combinar datos geográficos con información demográfica y de comportamiento del consumidor, los minoristas pueden segmentar su mercado de manera más precisa y personalizar sus mensajes publicitarios. Esto les permite dirigirse a audiencias específicas en ubicaciones estratégicas, adaptar promociones y ofertas locales y maximizar el retorno de inversión en marketing.
Los datos son, sin duda, un activo clave en el mundo del marketing. El Geomarketing aprovecha esta premisa y ofrece a las empresas diversas ventajas como la segmentación geográfica del target, la definición de estrategias de marketing geolocalizadas, el análisis de la red de distribución, incluso la definición de la ubicación de nuevas tiendas físicas, en este sentido, una batería sólida de acciones de geomarketing permite conocer a fondo las particularidades de las ventas en una zona específica y adaptar las estrategias a las necesidades de un público concreto.
De acuerdo con Robert Alayón, Industry Insigths Manager para Venezuela de Nielsen IQ, «en el retail el análisis de datos es como una varita mágica que te permite reconocer algunas ideas ocultas o ideas novedosas para el negocio, pero esto requiere desarrollo, tener un equipo altamente capacitado, en mi opinión, esta es una de las capacidades que la industria del retail aún debe desarrollar».
Otra aplicación del geomarketing es el análisis de la competencia. Al evaluar la ubicación y el rendimiento de los competidores en relación con las propias tiendas, los minoristas pueden identificar oportunidades para diferenciarse y fortalecer su posición en el mercado. Esto puede incluir la identificación de áreas desatendidas por la competencia, la evaluación de la saturación del mercado en una ubicación determinada y el análisis de las estrategias promocionales de los competidores.
