Las grandes empresas tecnológicas —Amazon, Alphabet (matriz de Google), Microsoft y Meta— anunciaron que están preparadas para invertir hasta $364 mil millones acumulados en sus respectivos años fiscales de 2025, impulsadas por el auge de la Inteligencia Artificial (IA). Esta cifra representa un aumento significativo frente a sus estimaciones previas, que rondaban los $325 mil millones.
En comparación con el año 2022, las gigantes tecnológicas han elevado en 140% su inversión anual en IA, una clara señal de la apuesta decidida en lo que ya puede definirse como una carrera por el desarrollo de la Inteligencia Artificial.
Meta
En una publicación de Threads, Marc Zuckerberg, CEO de Meta, reveló planes para gastar cientos de miles de millones de dólares en la construcción de varios centros de datos masivos de IA en EE UU, incluido uno que entrará en funcionamiento tan pronto como el próximo año.
Para el genio Zuckerberg, la apuesta por la IA no se trata solo de centros de datos, también está gastando dinero en contrataciones de IA de alto perfil. En junio, Meta invirtió 14,3 mil millones de dólares en Scale AI y contrató a su CEO Alexandr Wang. La compañía también contrató al ex CEO de GitHub, Nat Friedman, y al CEO de Safe Superintelligence, Daniel Gross, y capturó al jefe de modelos de base de IA de Apple, Ruoming Pang, de acuerdo con un reporte de Bloomberg.
Los esfuerzos de IA de Meta difieren significativamente de los de OpenAI, Anthropic, Perplexity e incluso Microsoft y Google. En lugar de usar su tecnología para explorar preguntas sobre el universo o impulsar los servicios de software basados en la nube y la empresa, Zuckerberg dijo que la compañía está tratando de hacer de su plataforma de inteligencia artificial una especie de «superinteligencia personal».
Amazon
Amazon prevé incrementar su inversión en capital hasta los 100.000 millones de dólares en 2025, un aumento del 29% respecto a 2024. A pesar de las expectativas sobre un posible descenso en el gasto en inteligencia artificial debido a la optimización de costos, Amazon, al igual que Microsoft, Google y Meta, mantiene su apuesta por una expansión acelerada en este campo argumentando que la reducción de los costos tecnológicos no disminuye el gasto total, sino que incentiva un mayor uso de la tecnología.
La mayoría del capital se destina a fortalecer la infraestructura de Amazon Web Services (AWS), incluyendo centros de datos, redes, chips y hardware especializado para IA generativa.
Buena parte de la inversión en IA de Amazón la destinó en su Alexa+, una evolución del asistente tradicional, ahora potenciado por inteligencia artificial generativa. La nueva versión no se trata solo de responder preguntas, sino de comprender el contexto, el tono y las necesidades del usuario para ejecutar tareas más complejas.
La compañía también lleva tiempo trabajando en Olympus, que es un LLM (modelo de lenguaje grande) que tiene el doble de parámetros que GPT-4 y que en teoría debe poder competir con los modelos más potentes en la actualidad.
El director financiero de Alphabet (casa matriz de Google), Anat Ashkenazi, dijo que el gigante tecnológico gastaría 85.000 millones de dólares en 2025 en lugar de su estimación anterior de 75.000 millones de dólares, «dada la fuerte demanda de nuestros productos y servicios en la nube».
Los principales proyectos de Google con los que aspira a competir en la carrera por la IA son: Gemini en sus versiones 2.5 y Flash, al igual que el Project Mariner, el Deep Research, sus TPUs, Google AI Pro y su infraestructura global para la Inteligencia Artificial.
Sundar Pichai, director ejecutivo de Alphabet Inc. explicó recientemente en una entrevista con Bloomberg que la inteligencia artificial se encuentra en el núcleo de la estrategia de Google, con avances significativos en modelos como Gemini, que ya se integran en una amplia gama de productos. “Hemos estado entrenando Gemini y lanzando versiones cada pocos meses. Creo que la versión 2.5 fue un verdadero avance en capacidades”, señaló el CEO, destacando que la integración de estos modelos en servicios como YouTube, Google Search y Google AI Pro está transformando la experiencia de los usuarios.
Sobre las predicciones que apuntan a la posible eliminación de hasta el 50% de los empleos de oficina en los próximos cinco años, Pichai instó a tomarlas en serio, pero recordó que la historia demuestra que la tecnología suele crear nuevas oportunidades. “El 60% de los empleos actuales no existían en 1940”, citó, haciendo referencia a un estudio del economista David Autor. El CEO de Alphabet subrayó la importancia de debatir sobre la recualificación profesional y la creación de redes de seguridad social para afrontar los cambios que trae la IA.
Microsoft
Microsoft no se queda atrás y también está invirtiendo fuertemente en su infraestructura de IA. En 2025, la compañía planea gastar 80 mil millones de dólares en la construcción de centros de datos para respaldar el crecimiento exponencial de sus servicios de inteligencia artificial, como ChatGPT, Copilot y Azure AI.
En 2025, el enfoque principal de Copilot es el desarrollo de agentes de IA capaces de realizar tareas complejas sin intervención humana. Por ejemplo, redactar contratos, generar propuestas comerciales o analizar grandes volúmenes de datos.
La plataforma de computación en la nube de Microsoft, Azure, es el motor detrás de la mayoría de sus proyectos de IA. Microsoft está lanzando nuevos servicios y herramientas para que los desarrolladores puedan crear y desplegar soluciones de IA de manera más fácil y rápida.
La alianza con OpenAI sigue siendo fundamental. Microsoft aspira a fortalecer su posición como proveedor de la nube para las cargas de trabajo de IA de OpenAI y desarrolla supercomputadoras especializadas para la investigación en IA.
Con información de Bloomberg / Yahoo Finance
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