El tándem conformado por Shein, Temu, Aliexpress bien puede ser definido como la cabeza de playa de lo que ya es una realidad: el desembarco de gigantes chinos en el mundo del retail. Las tres marcas tienen en común su origen chino, su modelo de negocio basado en el comercio electrónico, la oferta de precios competitivos y portafolios de productos similares.
Shein, en particular, ha conquistado el mercado con un modelo de negocio que combina las últimas tendencias de la moda con precios accesibles, lo que ha resultado en un crecimiento exponencial de sus ingresos, que ya superan los $24 mil millones y lo convierten en uno de los minoristas de moda más grandes del mundo.
La gigante asiática está valorada actualmente en unos 60.000 millones de euros, según la estimación de la última ronda de financiación que fue filtrada. De igual modo, el beneficio de la compañía se ha multiplicado en los últimos años, hasta alcanzar la cifra de los 2.000 millones de dólares en 2023. Unas cifras arrolladoras, pero que todavía no compiten contra las ganancias de 5.831 millones de la española Inditex y el valor de mercado cercano a los 140.000 millones de euros de la casa matriz de Zara.
Por su parte, Temu, aunque más reciente en el mercado, ha seguido una trayectoria similar. Este gigante chino utiliza la tecnología de la información para emparejar directamente la demanda del consumidor con la producción dispersa por una colección de fábricas en China.
Temu genera ingresos sostenibles a través de tarifas de comisión, planes de suscripción y publicidad dentro de su aplicación móvil, enfatizando la conveniencia, oportunidades de ingresos flexibles y un fuerte compromiso con la satisfacción del cliente. Bajo esa plataforma, ofrece una amplia variedad de productos en varias categorías, incluyendo: ropa y accesorios, electrónica, hogar, cocina, belleza, salud, juguetes y juegos.
AliExpress, subsidiaria del Grupo Alibaba, opera bajo un modelo de negocio B2C (Business to Consumer). AliExpress actúa solo como una plataforma de comercio electrónico y no vende sus productos directamente a los consumidores.
En cambio, conecta directamente a las empresas chinas con los compradores, a menudo utilizada por tiendas de comercio electrónico que emplean un modelo de negocio de dropshipping. AliExpress comenzó inicialmente como una plataforma B2B, pero cambió a B2C después de descubrir que más del 70% de sus clientes eran consumidores individuales.
Alibaba (casa matriz de Aliexpress) aparece como la tercera marca china más valiosa del 2024, valorada en 68.482 millones de dólares en el ranquin Kantar, empresa de análisis y datos de marketing líder en el mundo.
A la hora de evaluar las perspectivas 2025 del negocio escribe el experto en el retail, Laureano Turienzo, en su cuenta de Linkedin, que «China pasará de ser la fábrica de Occidente a ser el creador de las tendencias de Occidente. Shein, Temu, Aliexpress… son solo los caballos de troya de lo que va a llegar. Este año es el año uno del comienzo de la ruta de la seda inversa».
