Sostenibilidad de marca, un asunto más allá de las finanzas

Los modelos actuales de sostenibilidad de los negocios, y en particular de las marcas, van mucho más allá de lo financiero, de su mercado y lo Laboral. Involucran una visión holística que abarca responsabilidad social, medioambiental y de gobernanza corporativa.

El cliente es y seguirá siendo importante, pero también lo son los trabajadores, las comunidades y sociedad en general. Esta nueva visión incluye prácticas como el respeto a los derechos humanos, la creación de empleo digno, el desarrollo de la comunidad local, el apoyo a causas benéficas y la promoción de la diversidad e inclusión.

Las marcas cada día dedican más esfuerzo y recursos en políticas que no solo generan valor económico, sino que también contribuyen al bienestar social y ambiental, convirtiéndose en agentes de cambio positivo.

El caso Inditex

Inditex, el holding del magnate español Amancio Ortega, es la casa matriz de poderosas marcas como Zara, Pull&Bear, Massimo Dutti, Bershka, Stradivarius, Oysho, Zara Home y Uterqüe y opera bajo el pilar de que la sostenibilidad es la base de la transformación.

En lo que tiene que ver con el medio ambiente, en 2022, lograron un 100% de consumo de energía de origen renovable en todas sus instalaciones propias (sede, centros logísticos, fábricas y tiendas), superando el 80% previsto anteriormente para 2025.

Zara es una de las marcas del grupo Inditex comprometida con la cadena de transformación del medio ambiente.

La hoja de ruta fijó en 2023 un 100% de recogida de todos los materiales de paquetería para su reciclaje o reutilización en la cadena de suministro. Mientras que el desafío del próximo año es una reducción del 25% del consumo de agua en la cadena de suministro.

El objetivo más ambicioso del holding español está fijado para el 2040, cuando aspira a cero emisiones netas, adelantando diez años el anterior objetivo previsto para 2050.

Además, Inditex desarrolla procesos de debida diligencia para detectar los potenciales impactos en materia de derechos humanos derivados de su actividad, en dos focos: las cadenas de suministro y de valor. Esta estrategia se desarrolla en torno a tres pilares clave: salud, protección y empoderamiento.

Ikea enfocada en el clima

Ikea el minorista sueco de muebles, que abrió su primera ubicación en Estados Unidos en Plymouth Meeting, Pensilvania, en 1985, ha logrado un gran progreso en muchos de sus objetivos de sostenibilidad.

Mardi Ditze, directora nacional de sostenibilidad de Ikea en Estados Unidos, citada por el portal de la National Retail Federation (NRF), aseguró que «el 90% de nuestras unidades (en EE UU) utilizan energía renovable y estamos produciendo más de lo que usamos».

Educar e involucrar a todos a lo largo de la cadena de suministro, desde los proveedores hasta los clientes es uno de los objetivos de Ikea.

Uno de los esfuerzos más recientes de Ikea en EE UU es su «programa de recompra y reventa», que permite a los clientes traer de vuelta un artículo usado de Ikea y recibir un cupón para usar en la tienda. Ikea venderá el producto en sus tiendas «tal cual», lo donará si no se puede vender o reciclará el artículo.

Igualmente, educar e involucrar a todos a lo largo de la cadena de suministro, desde los proveedores hasta los clientes, es una parte importante del trabajo de sostenibilidad. 

Para los negocios, para las marcas de hoy la conexión con la responsabilidad social, medioambiental, con el talento humano y la sociedad en su conjunto ya no son una opción son un fin en sí mismo especialmente si se trata de conectar con las generaciones Z o los Millenials cuyos hábitos de consumo, preferencias laborales y participación activa en iniciativas de cambio son constantes.

Este cambio de paradigma representa una oportunidad y un desafío para las empresas y organizaciones que buscan adaptarse a las nuevas expectativas y preferencias de estos jóvenes consumidores y trabajadores.