A casi tres años de su salida del mercado venezolano, Zara, uno de los buques insignia como tienda de moda española, planea su regreso a Venezuela, con la apertura de una sucursal en Caracas para julio de 2024.
La reanudación de las operaciones de la compañía se produce como resultado de la recuperación del poder adquisitivo de los venezolanos. En ese sentido, el control de la hiperinflación con la dolarización generalizada, sumado a la decisión del gobierno de Venezuela de liberar controles de la gestión empresarial y las importaciones, sumados a una relajación en las sanciones por parte de Estados Unidos, reabrieron la puerta de la marca española.
La estrategia distintiva de Zara se basa en la combinación de diseño, fabricación y distribución eficiente. La empresa controla toda la cadena de suministro, desde el diseño y producción hasta la comercialización y venta al por menor. Esto le permite ser ágil y responder rápidamente a las tendencias cambiantes de moda.
La línea de negocios de Zara se centra en ofrecer moda rápida y actualizada para hombres, mujeres y niños, con una estrategia basada en diseño, fabricación ágil, distribución eficiente y una experiencia de compra atractiva tanto en tiendas físicas como en línea.
De acuerdo con lo informado por el portal Bloomberg Línea, la empresa matriz de Zara, Inditex SA, comunicó que el operador local de franquicias Grupo Futura será el encargado de la reapertura.
La compañía llegó a contar con una veintena de tiendas repartidas por Venezuela; aunque en los últimos tiempos antes de su salida, en el 2021, solo mantenía abiertos cinco establecimientos concentrados en Caracas, unos negocios que gestionaba en régimen de franquicias, a diferencia de su modelo de negocio en la mayoría de países, donde cuenta con tiendas propias. Y, precisamente, este es el modelo de negocios (franquicia) que ha escogido para volver al país con su primera tienda.
La casa matriz de Zara, Inditex, del empresario español Amancio Ortega, tenía en Venezuela una plaza muy rentable, con tiendas diseminadas en la mayoría de las ciudades. Sin embargo, el creciente aislamiento internacional, las multas, el control cambiario y de precios, aunados a las continuas fiscalizaciones iniciadas por el gobierno venezolano en 2014, agravado por la pandemia de covid-19, provocaron la salida definitiva del país en 2021.
Con información de Fortuna / La Voz de Galicia
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